Alta autónomos

En un mundo cada vez más globalizado, a menudo vemos cómo surgen oportunidades laborales de todo tipo. De salida, la figura del autónomo contractor puede parecer interesante para quienes buscan nuevas experiencias profesionales. Pero, ¿qué es y cómo factura? ¡Lo vemos!

Autónomo contractor qué es

EI autónomo contractor es un profesional independiente que, siendo residente fiscal en España, ofrece sus servicios de manera autónoma a empresas extranjeras a través de contratos y proyectos específicos. Esta figura combina la autonomía y flexibilidad típicas de los trabajadores autónomos con la estabilidad que puedes tener al ser contractor.

Normalmente, el autónomo contractor tiene estas características:

  • Trabaja a tiempo completo para una empresa del extranjero.
  • Tiene residencia fiscal en España.
  • Está dado de alta como autónomo en Hacienda y en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos).

Al ser autónomo contractor, como imaginas, tendrás que cumplir con una serie de obligaciones fiscales específicas

  • Pagar la cuota de autónomos (hay posibilidad de tarifa plana el primer año, luego va en función de beneficios).
  • Presentar los modelos de impuestos (ten en cuenta que aunque recibas los ingresos en monedas diferentes al euro, tus impuestos deben declararse oficialmente en euros).
  • Presentar la declaración de la Renta.

Muchos lo ven como una alternativa para poder seguir viviendo en España, pero al mismo tiempo que se hacen negocios con empresas internacionales, lo cual puede ser muy beneficioso.

  • Nota importante: en caso de recibir ingresos de Estados Unidos, el autónomo tiene que rellenar y enviar el formulario W-8BEN. ¡Si no sabes cómo podemos ayudarte!

Cómo factura un autónomo contractor

En cuanto a la forma de facturar, depende de si el cliente es de la Unión Europea o de un país fuera de la Unión Europea.

  • Si el cliente pertenece a la Unión Europea, debes estar registrado en el ROI y emitir facturas con un 0% de IVA (siempre que ambos estén registrados en el ROI). De lo contrario, deberás aplicar un 21% de IVA. En ambos casos, la retención de IRPF que llevan las facturas es del 0%.
  • Si el cliente está fuera de la Unión Europea, como autónomo, debes emitir facturas con un 0% de IVA y una retención del 0%.

Simplemente, realizas y presentas las facturas de forma normal, como lo hace cualquier autónomo en España, pero teniendo en cuenta estos requisitos.

Es una forma de facturar que tiene sus ventajas, porque en la mayor parte de los casos no tendrás que lidiar con el IVA. Así la contabilidad también es más sencilla.

¿Merece la pena?

En algunos casos, trabajar como contractor para una empresa extranjera puede ser muy interesante para los freelance. Es una alternativa que se puede considerar, y que te animamos a probar. Sobre todo si tienes curiosidad o quieres salir de tu zona de confort.

En primer lugar, te permite acceder a oportunidades laborales en mercados extranjeros que de otra forma podría ser mucho más complejo. Además de tener acceso a tecnologías y recursos que podrían no estar disponibles localmente.

Otra ventaja importante, es la posibilidad de hacer networking internacional, lo que siempre te puede abrir puerta en el futuro.

Es una oportunidad que te puede abrir muchas puertas laborales y que puede permitirte disfrutar de un sueldo superior

Sin pasar por alto una de las partes fundamentales: el sueldo. Normalmente, en este tipo de colaboraciones se suele ingresar un sueldo más alto que el sueldo medio en España, principalmente por el elevado coste del nivel de vida en muchos países extranjeros, como puede ser Suiza.

En cualquier caso, antes de aceptar un contrato internacional es importante que lo investigues y mires a ver si te merece la pena. Recuerda que nosotros podemos ayudarte. 

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