Es posible que hayas oído que algunos autónomos podrán dejar de facturar con IVA. Esta iniciativa de permitir que los autónomos que ganen menos de 85.000 euros dejen de presentar el IVA se conoce como «IVA franquiciado«. Veamos en qué consiste.
IVA Franquiciado
El IVA franquiciado podría ser una realidad muy pronto y afectar a un buen número de autónomos. Sobre todo a muchos freelance que teletrabajan desde sus domicilios.
Esta medida ha sido recibida con gran acogida por el colectivo y responde a una directiva europea (Directiva (UE) 2020/285) que exige su implementación antes de 2025, por lo que entraría en vigor en España para esa fecha, pudiendo beneficiar a muchos autónomos.
¿En qué consiste exactamente el IVA franquiciado?
El IVA franquiciado es un sistema que exime a los autónomos de la obligación de presentar declaraciones de IVA.
Es decir, ya no tendrán que añadir el IVA en las facturas ni tampoco presentar el Modelo 303, independientemente del tipo de IVA con el que trabajen.
Es completamente opcional, podrán disfrutarlo los autónomos que quieran (siempre que facturen < de 85.000 euros)
Es importante destacar que esta exención es opcional según la ley. Es decir, nadie puede ser forzado a dejar de incluir el IVA en las facturas.
Tampoco supone cambio alguno para las empresas con las que trabajes, dado que igualmente se ahorrarán el IVA y podrán seguir deduciendo la factura como gasto para bajar la base imponible. Por esa parte no tienes de qué preocuparte.
Tras un periodo de transición, es posible que lo veamos implementado para 2025
Este sistema se espera que entre en vigor en 2025. Es posible que para finales de 2024 se encuentren dando las últimas pinceladas para ponerlo en marcha, pero Europa exige que se implemente para 2025.
Aunque aún no se conoce en detalle cómo funcionará el IVA franquiciado, es probable que establezca un sistema paralelo de IVA donde no sea obligatorio tributar por él, similar a ciertas actividades que actualmente están exentas de IVA.
Los autónomos que ahora tienen la obligación de añadir el IVA a sus facturas, podrían elegir si quieren incluir o no el IVA.
Claro que, no es oro todo lo que reluce. Es un sistema que también tiene sus inconvenientes, como la pérdida de la capacidad de deducir el IVA soportado. Esto afectará a los autónomos que tengan muchos gastos, porque ya no podrían deducir el IVA.
Si te acoges al IVA franquiciado, no te podrás deducir el IVA de lo que compres
El principal punto negativo, sin duda es este. Si decides acogerte al IVA franquiciado, ya no te vas a poder deducir el IVA de lo que compres.
Es decir, si un móvil te cuesta 1000 euros, te costará 1000 euros. No podrás descontar los 210 euros correspondientes de IVA.
Si tienes mucho gasto, podrías ver que no te compensa porque todo te sale mucho más caro. Es cuestión de que eches cuentas y veas si te merece la pena o si prefieres seguir como ahora. Porque a veces más vale lo malo conocido que lo nuevo por conocer.
¿Quién podrá acogerse al IVA franquiciado?
Principalmente, los autónomos que facturan menos de 85.000 euros al año serán quienes podrán aprovechar este sistema. De forma opcional, pudiendo acogerse o no.
La principal ventaja es el hecho de poder ofrecer un precio más competitivo al cliente final, sobre todo en el caso de clientes particulares. Si tienes mucho, te puede compensar. Si no tienes ninguno, la cosa cambia.
Otra ventaja importante es que así los autónomos tendrán que enfrentarse a menos trámites administrativos y menos riesgo de multas por irregularidades en la declaración de IVA.
¿Qué te parece la medida? ¿Te animarías a probar este sistema para cuando entre en vigor?
